Los cinco elementos
Capitulo
Once:
Reuniones.
-Papi, el Señor
Ondas ‘dice’ que somos ‘Los
visitantes’, pero no es verdad, somos ‘Los Malfoy’ ¿verdad? – le preguntó el
niño desconcertado.
-¡Qué interesante! Así que tu hijo, domina ese elemento – dijo con una sonrisa
de lado Terry. Y Draco solo le envió una mirada preocupada.
-Relájate Malfoy, no es el fin del mundo – decía como si nada Terry,
mientras se levantaba de la silla y se dirigía hacia ellos – su ‘secreto’ está a salvo conmigo – le dijo
con una sonrisa, que definitivamente a Malfoy no le tranquilizó. Terry puso los
ojos en blanco – soy parte del ED ¿de acuerdo? Harry me dijo más o menos como
está el asunto.
-Ya… veo – murmuró Draco.
-Así es – dijo Terry, sin cambiar su mirada fría hacia el rubio – los dejo
para que desayunen – anunció mientras alborotaba la cabellera rubia de
Scorpius, el cual estaba sentado ya desayunando.
-Claro – musitó Draco con cierta hostilidad hacia Terry. Había algo de
ese chico que no sabía cómo describir, pues no sabía muy bien qué era, odiaba
que le ocurriera eso, si tan solo no tuviera problemas con su magia, quizás
sabría muy bien de qué se trataba.
-Por cierto Malfoy – llamó Terry desde la puerta – por más que Harry te
haya dicho que te sientas como en tu casa,
no es para que andes como si en verdad estuvieras en ella – exclamó el moreno,
mientras le recorría con la mirada su cuerpo.
Draco frunció el ceño ¿de qué demonios hablaba Terry? Después de unos
momentos cayó en cuenta que solo estaba con el pans de la pijama.
-Papi – llamó Scorpius, mientras que con sus manitas seguía arreglando
su cabello – ¿Dónde está Teddy? – Draco enarcó una ceja ¿Teddy? ¿Quién demonios
era ese Teddy?
*****
Blaise suspiró largamente, mientras se subía la capucha de su capa,
antes de entrar en aquella cabaña. Cerró su mente y se dispuso a entrar. Dentro
de aquel lugar estaban los tres Mortífagos
y frente a ellos: Voldemort.
-Adelante chico – llamó el Lord en cuanto vio a Blaise entrar – ¿cómo
esta nuestro invitado especial?
-Encerrado en el calabozo, mi Lord – respondió de manera apacible el ex
Slytherin.
-Eso no será suficiente – reflexionaba el de ojos carmesí – el aire esta por todos lados… y puede
llevar mensajes de un lado a otro —
Blaise entornó los ojos al escuchar lo que decía Voldemort, confirmándole que
ya sabía el ‘secreto’ de su amigo –
tendrás que mantenerlo dormido.
-Sí, mi Lord – respondió Blaise.
-Esta tarea será para McKinnons – el aludido sonrió de lado. En cambio
Blaise frunció el ceño.
-Sí, mi Lord – respondió McKinnons.
-En cuanto a ustedes – se dirigió hacia los otros dos – Morseferth y
Rowle, necesito al mocoso, no es necesario decirles qué sucederá si no lo
tienen a principios del próximo vez ¿cierto? – Los aludidos no respondieron —
¡Vayan!
-Sí, mi Lord – exclamaron los encapuchados desapareciendo del lugar y McKinnons salió para hacer dormir al invitado especial. Quedando solos Voldemort y Blaise.
-El traidor te buscará – comenzó hablar Voldemort y Blaise trató de
controlarse, presintiendo lo que venía a continuación – es necesario que te
encuentre – el Lord caminó alrededor del ex Slytherin – el niño es
indispensable para el hechizo, lo necesito para finales de este mes, tengo que
prepararlo… confío en que me lo traerás.
-Sí, mi Lord – respondió Blaise.
*****
Caminaba de un lado a otro en aquella sala, en su mente le rondaban
muchas cosas: Scorpius, Blaise, Theo, Luna. Estaba solo en aquella casa, tres
horas antes tanto Harry como Terry se habían despedido de él para irse a
trabajar. Minutos antes había ido a dejar a dormir a Scorpius en aquel cuarto y
en ese momento se encontraba ideando un plan o al menos eso intentaba.
[¿Eres pariente de ese
pequeñito curioso?]- preguntó el televisor.
Draco hizo un movimiento con la mano como queriendo apartar ese molesto
ruido en su mente. Porque sí era molesto, lo escuchaba como si fuera un grito,
un terrible grito, a pesar de que así
no lo era.
“Si tan solo pudiera
localizar…” – trataba
de reflexionar Draco.
[¿No piensas
contestarme?]- Insistió el televisor.
“¡Theo! ¿Qué demonios ocurrió con Theo?” – pensaba Draco, tratando de ignorar el molesto ruido.
[¡Qué mal educado!]- se quejó la televisión.
[¿Quién es ese Theo?] – Esta vez fue el DVD – [¿también va a venir aquí?]
“Estoy seguro que hay un patrón en esto… y…”
[No sé por qué el amo
Harry dejó entrar a…]
-Agggg ¡Se podían callar! – gritó de pronto Draco tapándose las orejas,
más por reflejo que por conseguir algo, ya que las ‘voces’ de los aparatos las escuchaba en su mente.
[NO] – Respondió ofendido el DVD – [A mi no me callas, ¿Quién te crees que eres?]
-¡El que te puede desconectar si no me dejas pensar! – le amenazó Draco
arrastrando las palabras y viéndolo de mala manera.
[¡Uy! Qué miedo] – se burló el aparato.
Draco entrecerró los ojos, ese maldito aparato le estaba colmando la
paciencia. Hubiera preferido haberse ido a la cocina, pero los
electrodomésticos de allá eran más parlanchines. Y no podía estar en la
habitación donde dormía Scorpius, porque el maldito despertador era tan
entrometido que terminaría despertándolo.
-Odio este don – se quejó el
rubio, sentándose en el sillón mientras se masajeaba las sienes.
[Oye, no vayas a ensuciar]
-¡Te podrías callar! – esta vez gritó.
-Si no he dicho nada – Draco volteó su cara (demasiado rápido, incluso
creyó que se había lastimado) hasta donde había escuchado esa voz,
encontrándose con Harry Potter que lo veía frunciendo el ceño.
-Yo… — Draco se sonrojó.
[Ya no eres tan valiente
¡eh!] – se burló el
DVD
Draco gruñó asesinándolo con la mirada.
-¿Malfoy? – preguntó Harry enarcando una ceja.
-Lo siento, no te lo decía a ti – murmuró el rubio.
-¿No? – interrogó Harry volteando a los lados, pero no encontró a nadie
más.
-No – gruñó Draco.
-Claro… seguramente se lo decías al DVD – bromeó Harry y Draco abrió la
boca para reclamarle… pero cambió de opinión.
-¿Qué haces aquí? – decidió cambiar el tema y haciendo lo posible por
ignorar a los aparatos. Vio a Harry enarcar una ceja – sé que es tu casa, pero
si mal no lo recuerdo, dijiste que llegarías hasta en la tarde.
-Pedí la tarde libre, hoy vendrán Luna, Neville, Hermione, Ron y Terry
para hablar lo del hechizo.
-Oh – exclamó Draco - ¿no vendrán los demás?
-Hermione solo llamó a ellos, ya sabes… por la seguridad de Scorpius y
tuya, es mejor trabajar con las personas que hemos estado con más contacto en
los últimos meses – eso fue suficiente para Draco, si Potter confiaba mas en
ellos, para él era suficiente, aunque le extrañó que no mencionara el nombre de
la Weasley menor, pero luego recordó que Potter era novio de Terry. A Potter le gustaban los chicos.
*****
McKinnons entró en aquel calabozo y encontró a Theo sentado, con los
ojos cerrado y muy, demasiado
concentrado.
-¡Maldito! – Susurró el encapuchado enojado — ¡Expulso! – hechizó y Theo salió volando hasta chocar con la pared.
Cayó bruscamente hacia el piso. El castaño jadeó ante la sorpresa de
haber sido sorprendido. No se había percatado o mejor dicho el aire no le advirtió de la presencia de
alguien más.
-¿Ocupado Nott? – espetó el mortífago. Theo frunció el ceño ¿Por qué el
aire no le advirtió? ¿Por qué? – el aire no te ha traicionado, si es lo que
piensas…
-¿Tú…? – Theo se levantó con dificultad y lo veía de manera perpleja
¿Cómo no se dio cuenta de ello? – tú también ¿cierto? – El mortífago se encogió
de hombros.
-Bebe – le indicó mientras le acercaba un pequeño frasco con un líquido
color morado.
-¿Qué es? – interrogó el de ojos azules sin agarrar el frasco.
-Solo bébelo – ordenó McKinnons. Theo no se movió – será por las malas,
supongo – dijo el encapuchado fingiendo pena.
Theo dio pasos hacia atrás aunque eso era inútil, ya que topó con la
pared. Si tan solo hubiera llegado unos cuantos segundos más tarde, si tan solo
contara con sus fuerzas al cien por ciento, si tan solo…
Un golpe certero en su estomago lo hizo caer del dolor, arrodillándose
ante el mortífago.
-Así está mejor – sonrió con malicia el mortífago acercándose a él, lo
tomó de los cabellos e inclinó su cabeza hacia atrás, exponiendo así su boca
entreabierta – bébelo – volvió ordenar y sin esperar alguna respuesta le empinó
el frasco en los labios e hizo que se tomara el contenido.
Theo hizo lo posible para no tomar aquel líquido amargo, sin embargo
fueron inútiles sus esfuerzos, terminó tragando la mayor cantidad de aquella
sustancia. Solo fue cuestión de segundos para sentir cómo su cuerpo se
adormecía.
-Dulces sueños – le dijo con una sonrisa de lado, mientras lo soltaba
sin mayor consideración – y ojalá no despiertes – McKinnons lo veía de manera
fría – no me conviene que seas mi reemplazo, así que, disfruta tus últimos
momentos… Elemento del Aire.
*****
Draco dudó por varios momentos, pero la presión de seis pares de ojos
viéndolo expectante y las miradas de aquel niño con cabello de color morado y
la de su hijo, lo hicieron aceptar aquella petición.
En cuanto asintió, los dos niños brincaron de alegría. Hermione se
acercó a ellos y se desapareció con
ellos.
-No te preocupes, estarán bien – le calmó Harry – Molly es una gran
persona, además la Madriguera está muy bien protegida.
-Además Ginny los cuidará – aclaró Ron – créeme que estarán bien, es una
experta con los niños, ha estado cuidando a Teddy muchas veces.
Draco se quiso sentir tranquilo ante eso, pero sinceramente, si las
palabras del héroe mágico no lo tranquilizaron mucho… no lo harían las de aquel
pelirrojo. Pero tenía que admitir (aunque no se los dijera en persona) que
tenían razón, Scorpius se aburría estando en el cuarto encerrado solo o incluso
con ellos y lo mejor era que lo mandaran a la Madriguera, ahí estaría
acompañado por el pequeño Freddy* y Teddy.
Además vio cómo su hijo se había alegrado mucho al ver aparecer a Teddy
junto a Hermione. Al parecer su hijo se estaba acoplando a su nuevo estilo de vida.
-Muy bien, en cuanto llegue Hermione, comenzaremos con la reunión –
exclamó Harry, invitando a los demás a sentarse en la sala.
Draco se sentó en un lugar alejado lo más posible de aquel molesto
aparato, sin dejar de observar a los que habían llegado al lugar. Vio a Neville
sentarse al lado derecho de Luna, la cual lo observaba de manera atenta como si
quisiera preguntarle algo. A Boot sentarse frente a Harry al lado izquierdo de
Neville. Y por último a Ron sentarse en una silla independiente.
-Luna – la llamó Draco, pero no solo acaparó la atención de la chica si
no de los demás también. Malfoy ¿Malfoy tuteaba a Luna? Eso era lo que se
preguntaban los chicos. El rubio carraspeó – ¿Theo se encuentra bien?
-¿Theo? – preguntó perplejo el pelirrojo — ¿Qué Theo?
-Theodore Nott, Ron – dejó salir Luna como si nada – mi novio.
-¿Tu ex compañero de casa? – preguntó Harry parpadeando incrédulo hacia
Draco.
-¿No lo sabían? – exclamó Draco un poco indignado.
-No – informó Luna – pensábamos decírselos en esta semana – anunció la
rubia a sus amigos – Como sea, si me preguntas eso, entonces… no sabes nada de
él ¿cierto?
-¿Debería? – Preguntó en un hilo de voz Draco – es decir, la ultima vez
lo vi fue en aquel callejón cuando nos atacaron los Mortífagos y…
-Fue capturado – concluyó Hermione, sorprendiéndolos con su presencia
repentina.
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N/A
*Lo que está en cursiva y entre corchetes solo lo escucha Draco, ya que
es parte de su elemento.
*Freddy: es el hijo de George y Angelina.
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este lo comento por los tres jejeje
ResponderEliminar1ero que don mas raro es ese jejeje digo escuchar los electrodomésticos (?)
2do me encanto la inclusión del ED
3ero me vas a hacer odiar a terry boot XD
4to me encanta ese tema de los elementos
y diria que no es mas jejeje ps este me va encantando como te va quedando ^-^
espero los actualices todos pronto
Att:Taeko-kun
Hola Taeko-kun =)
ResponderEliminarSee, me eamoré de él al leer la revista de Witch, a mi me encantaría tener ese don XD
Pues sip, el ED andará por estos lares :P
Jeje, al principio pueda que sip, pero despues hasta lo defendarás, ya verás U.U jejje XD
Gracias ^//^ me alegra que te esté gustando, esto de los elementos es nuevo para mi (me refiero al escribirlo), así que pos nada mas echo a volar la imaginación jejej
Besitos
PISLIB n_n