Capitulo dieciséis. Tragedia

No ha dejado de llover

Capitulo dieciséis. 

Tragedia

**Cuatro años tres meses atrás**

Penny gritó, apretando fuertemente el brazo de Luke, quien dio un chillido de dolor.

-Penny podrías no romperle el brazo a mi novio, ya casi llegamos al hospital – Calum pidió, viéndola desde el espejo retrovisor.

-Ashton, te dije… - respiró agitadamente – que ambos íbamos a tener a nuestros bebés el mismo día – una contracción la invadió, apretando más el agarre del brazo del rubio - ¡¿Por qué demonios no tienes contracciones?!

-Porque no las tengo – Ashton le sonrió, él iba en el asiento del copiloto, comiendo tranquilamente nueces. Su panza era demasiado prominente.

-¡Te ordeno que las tengas! – gritó.

-¡Penny, no siento mi brazo! – Luke lloriqueó.

-Tranquilo amor, ya casi llego.

-¡Oye, hazlo por Alexa no por el debilucho de tu novio!

-Penny… te digo que mi instinto paternal dice que será niño – Ashton le guiñó un ojo.

-¡Cállate y ya comienza con las contracciones!

Calum sonrió divertido.

-Te digo que…

Un fuerte golpe sacudió el carro en donde los cuatro jóvenes iban. Lo último que Ashton supo fue de un fuerte dolor en su abdomen.

[…]

Afuera llovía. Y no solo afuera. Dentro de Ashton también lo hacía.

-¿Ashton?

Había transcurrido una semana. Aún estaba en el hospital, pero ya nada era igual. Penny y él habían entrado a cirugía después del accidente. De los cuatro solo dos sobrevivieron.

-¿Ashton? –Luke volvió a llamar, el castaño giró a verlo. Su amigo se veía cansado. En su mirada había tristeza. Aun había rastro del accidente en su rostro y parte del cuerpo.

-¿Cómo esta Calum? – su voz salió apagada.

-Mejor, lo darán de alta en un par de horas. Le han enyesado la mano – comunicó.

Ashton asintió. No quería preguntar porque temía de la respuesta, pero aun así lo hizo.

-¿Cómo…? Él esta… ¿vivo?

Luke sabía que Ashton se refería a uno de sus bebés.

-Lo está – de alguna manera eso lo alivió.

Cuando despertó, tres días después de la cirugía, le dieron las malas noticias. Penny había muerto. También uno de los bebés. El otro estaba grave, se encontraba en una incubadora, luchando por su vida.

-Quisiera verlo – pidió.

Una hora después, Luke llevaba a Ashton en una silla de ruedas hasta la habitación en donde se encontraba el bebé. El verlo de esa manera le partió el corazón. Tan inocente y ya tenía que estar atado a una máquina. Ashton se mordió el labio inferior.

-El doctor dijo que él nació de…

-No quiero saberlo.

-¿Qué? – Luke parpadeó en confusión.

-Es mi hijo. No importa si nació de Penny o de mí. Es mi hijo y esta con vida. Eso es lo que importa.

Ashton no despegó la mirada del pequeño que dormía plácidamente, cada respiración era una lucha constante para sobrevivir.

-Thomas Irwin. Ese será su nombre – murmuró – así se llamaba el padre de Penny.

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