No ha dejado de llover
Capitulo doce.
Sorpresas
**Cuatro
años diez meses atrás**
Ashton estaba sentado en el sofá, su rostro siendo cubierto por las
palmas de sus manos.
-¿Qué piensas hacer? – preguntó Calum, quien se encontraba sentado a su
lado. Su amigo castaño había llegado y les había contado todo lo que Penny le
había dicho horas atrás en el parque - ¿Te… casarás con ella?
-No – Ashton frunció el ceño – no puedo condenarla a mí. Tendremos un
hijo, la apoyaré en todo. Probablemente nos vayamos a vivir juntos pero no
habrá nada de intimidad entre ambos. Amo a Penny, pero no de esa manera. Ella
siente lo mismo con respecto a mí.
-¿Qué pasará con Michael? – Luke lo miró fijamente, el rubio se había
mantenido en silencio hasta esos momentos.
-Él… él escuchó cuando Penny me lo dijo – Ashton bajó la mirada – ahora
no duda en nada que entre Penny y yo haya algo.
-Pero no lo hay, al menos no románticamente – dejó salir Calum – esto es
consecuencia del día que a ambos los drogaron, ¿cierto?
-Lo fue – el castaño se sentía cada vez más culpable de todo.
-Ashton… ¿estás bien? – Luke frunció el ceño al ver a su amigo pálido,
casi al borde del desmayo o de un ataque de vomito.
-No lo sé… - musitó, masajeándose las sienes.
-¿Has comido hoy? – Calum quiso saber, últimamente se había percatado
que su amigo no comía y cuando lo hacía vomitaba todo, no sabía si por lo
rápido que lo hacía o porque su estómago se estaba acostumbrado a estar vacío -
¿has dormido lo suficiente? – señaló hacia las mas que videntes ojeras del
castaño.
-No necesito más sermones – el castaño gruñó, levantándose rápidamente
lo que le pareció un grave error ya que en cuanto lo hizo todo dio vueltas y se
puso oscuro.
[…]
Cuando Ashton despertó pudo ver a Calum dormido a su lado y a Luke
acostado en el sofá de la esquina. Desconoció la habitación en la que se
encontraba pero el olor a antiséptico le dio una vaga idea de dónde se podía
encontrar.
-Hola, dormilón – Calum le saludó.
-¿Qué pasó? – el castaño estaba desconcertado.
-Te has desmayado – anunció Luke, llegando hasta su lado.
Ashton gruñó.
-¿Podemos irnos, ya? – hizo el intento de levantarse.
-Aún no – Calum lo regresó a su lugar – antes… tienes que saber algo.
-¿Qué cosa? – frunció el ceño.
-¿Qué tanto recuerdas la clase de biología? – inquirió Luke, Ashton
frunció el ceño.
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