Capítulo 10. Entrenamiento

Entre gorro y bufandas

Capítulo 10. 

Entrenamiento

Louis no podía apartar la mirada de Zayn y Harry.

-¿Ellos…? – el pitido del silbato, lo interrumpió.

-¡Reúnanse! – ordenó Simon.

Lentamente los chicos se acercaron hacia el entrenador.

-Practica de obstáculos – señaló hacia el otro extremo de la cancha en donde se encontraba su asistente y Liam – Mina y su capitán han preparado la cancha para la práctica. Se dividirán en dos equipos. Hemmings, Styles, Malik, Irwin a la derecha. Hood, Tomlinson, Lucas, Clifford a la izquierda – dio un pitido y los muchachos hicieron filas.

Harry quedó a la cabeza de la fila. Frente a él se encontraban dos hileras de llantas a las cuales tenía que atravesar brincando intercambiando de pies, después correr dos metros hasta llegar a una banderilla a la que tenía que rodear y regresar nuevamente a las hileras de llantas. 

Simon dio un pitido y enseguida Harry y Zayn, quien también encabezaba la fila de su lado, salieron corriendo hasta llegar  las hileras de llantas. Louis observaba todos los movimientos del ojiverde y la verdad era que le resultaba divertido. Harry tenía un estilo bastante peculiar en sus movimientos, pareciera que estaba haciendo movimiento de bailes y a la vez no. En cuestión de segundos atravesó el obstáculo de llantas y ahora trotaba en dirección hacia la banderilla, a tan solo dar un par de pasos dio una vuelta (muy al estilo bailarina) y continuó trotando, ocasionando varias risas entre sus compañeros. Llegó hasta la banderilla, la rodeó con un par de trotes para al final correr nuevamente hacia la fila de llantas.

-¿Acaso él...? – Louis no supo cómo formular la pregunta.

-Sí, sí lo hizo – Stan respondió sonriente – a veces hace marometas o le avienta besos a Zayn.

El ojiazul alzó una ceja.

Sí son novios, después de todo…

De alguna manera el ojiazul se sintió decepcionado.

-¿Louis?

-¿Sí?

-¡Es tu turno! – Stan, literalmente tuvo que empujarlo.

Louis no tuvo que esforzarse mucho. Ya había tenido entrenamientos similares anteriormente en su antiguo colegio, así que la actividad no le pareció tan complicada.

Diez minutos después, el entrenamiento finalizó con el pitido del silbato. Simon los reunió en la zona de descanso para darles un par de anuncios mientras Mina les repartía agua.

-Muy buen entrenamiento, chicos – los felicitó – El sábado tendremos las selecciones para los dos nuevos integrantes. La invitación es libre, pueden venir a verla o quedarse en su habitación a dormir como los holgazanes que no son – hubo un par de risas de parte del equipo – a excepción de Liam y Styles. Lo siento chicos, pero ustedes si tienen que venir. Como capitán y co-capitán del equipo es parte de sus obligaciones.

Louis giró a ver a Stan para comprobar lo que él creía haber oído. Stan solo se limitó a encogerse de hombros. ¿Esa podría ser una de las causa por las cuales Liam pareciera odiar a Harry? Ambos compartían el liderazgo del equipo.

-En fin, ¡a las duchas! – con un pitido final, dio por terminada la sesión de entrenamiento.

Louis y Stan fueron de los últimos en llegar a las duchas ya que los demás, literalmente, habían corrido para ser los primeros en ducharse.

-¡Niall, deja de violar a Harry con la mirada! – en cuanto cruzaron la puerta, la voz de Zayn se hizo presente, Louis casi cae al suelo al escuchar  tales palabras.

Los vestidores eran bastante espaciosos. Lo primero que se veía al entrar eran los casilleros de los miembros del equipo. Al fondo se encontraban las regaderas, divididas por muros pequeños. Las puertas eran de acrílico, por lo que en ocasiones no dejaba mucho a la imaginación lo que había detrás de ellas.

-¡No hago tal cosa! – Se quejó el rubio – Le estoy pidiendo de su shampoo rizos intensos.

Zayn estaba en la regadera de la derecha, Niall en la de la izquierda y Harry estaba justo en el medio de los dos.

-Tú ni siquiera tienes rizos – reclamó el moreno.

-¡Pero quiero tener! – Niall hizo pucheros.

-¡Oigan, ya quiero ducharme! – una cuarta voz se sumó al trío.

-¡Sal de aquí Stan! – se quejó Zayn.

Una risita bastante pegajosa hizo a Louis regresar a la realidad.

-¿Qué tal tu primer día de entrenamiento? – preguntó el muchacho que estaba frente a su casillero.

-Bastante bien, a decir verdad – confesó - Ashton, ¿Siempre son así en las duchas? – sonrió entretenido.

-Y en cada entrenamiento – le regresó la sonrisa.

-¿Alguien ha visto mis boxers? – a Louis casi se le cae la mandíbula al ver a, si su memoria no falla, Michael desnudo caminando por todo el vestidor preguntándole a todo el que se le atravesara por su ropa interior como si fuera la cosa más normal.

-Sí… también eso es muy común – Ashton negó con la cabeza mientras veía a su amigo llegar hasta su lado – Vamos, Mike, harás que a Tomlinson le dé un ataque – el castaño le aventó una de sus propias prendas.

-¡Ashton, eres el mejor! – el chico desnudo quiso abrazarlo, pero el castaño fue más rápido y se alejó de ahí rápidamente. Mike le guiñó un ojo a Louis antes de ir tras Ashton - ¡No se niegan los abrazos!

-Tomlinson, en dónde demonios te has metido – se dijo a sí mismo mientras intentaba abrir su casillero.

-Hola, vecino de casillero – Louis quedó en shock.

Frente a él estaba el chico de los hoyuelos. Gotas de agua escurrían por todo su cuerpo hasta perderse en la orilla de la toalla que rodeaba la cintura del ojiverde. El muchacho le sonreía y hablaba de algo que Louis no alcanzaba a comprender, bastante ocupado estaba observando su anatomía.

-¿Louis? – el muchacho alzó una ceja.

-¿Qué? – el aludido sacudió la cabeza.

Harry volvió a sonreír mientras se ponía una playera.

-El trabajo de Harris – le recordó.

-¡Cierto! Sí, hoy en la biblioteca, después del descanso.

-¡Perfecto!

-Es una cita – Louis se tapó la boca rápidamente – es decir…

-Así que, Tomlinson tendrá una cita con el pequeño Harry – Zayn llegó hasta con ellos.

-Zayn – advirtió Harry.

-No, no, no… - Louis sintió enrojecer.

Joder, ¿justo el novio tenía que escuchar cuando dije la palabra cita?

-Estudio, cita… emh… reunión de… estudio… - Louis no sabía cómo remediar su metida de pata.

-¿Sabes, Tomlinson? Me da gusto que estés en la clase de ese idiota, al menos sé que Harry está en buenas manos. Ya son tres personas que no lo dejaran solo.

Louis lo observó detenidamente y se preguntó internamente si Zayn sospechaba que el señor Harris trataba mal a Harry.

-Mamá Zayn – canturreó Niall, llegando a su lado.

-Quedamos que sería el papá – el moreno rodó los ojos, dirigiéndose hacia Niall.

Harry sonrió divertido.

-Es mejor que te des prisa, Stan suele ser el último y el que generalmente se termina el agua.

-¡Demonios, tienes razón! – Louis se dirigió hacia las regaderas – Te veo al rato, vecino de casillero – le sonrió.

Y Harry lo miró de manera extraña.

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